¡Hola Kubalienses!
Hace un par de semanas que no escribimos en el blog… teníamos mil cosas que contaros pero no nos daba la vida.
Pero hoy ya sí, hemos sacado un huequito para poder contaros la que, muy posiblemente, ha sido la fiesta más especial que hemos preparado desde que empezamos con esta aventura.
Se trata de la fiesta que hicimos el día 1 de Diciembre en el Hospital Niño Jesús para la Fundación Aladina.
Esta Fundación, nació en 2005 y hoy en día es una realidad que atiende cada año a más de 1.500 niños y sus familias en los siete hospitales públicos con los que colabora.
Nosotras podemos decir de primera mano que realizan una labor increíble. Dan a los niños un poquito de felicidad en momentos duros como los que viven y a los familiares apoyo y dedicación.
Pues bien, nosotras queríamos desde hace tiempo hacer algún tipo de evento solidario que ayudase o, por lo menos, diese una alegría a alguna persona que lo necesitase.
Investigando, conocimos la Fundación Aladina y les escribimos para enterarnos de cómo poder colaborar con nuestros eventos.
Estuvimos en contacto con Sara, una chica encantadora con un corazón gigante, quien nos propuso que podríamos organizar una fiesta en la sala Aladina del Hospital Niño Jesús y decorarla para que estuviese bonita y animada durante toda la Navidad.
Y así lo hicimos. Decoramos la sala con un árbol de madera de un metro y le pusimos luces y guirnaldas rojas. Además, añadimos un cordel de soga alrededor del mismo para que cada niño e invitado a la fiesta pudiese colgar sus deseos.
También pusimos unas nubecitas hechas con algodones y con adornos navideños colgando de las paredes y una gran estrella que alumbraba la entrada.
Preparamos, además, un regalito para cada niño de la unidad de oncología infantil del hospital que consistía en un pinito de madera que podían colgar del árbol (ellos prefirieron colgarlo en sus goteros 🙂 con una bolsita de nueces incorporada. Pretendíamos llevarles chuches pero ahí estaba Sara para decirnos que no era recomendable…Menos mal.
Llevamos a un par de amigos para animar la fiesta. Nos lo pasamos pipa. Estuvimos jugando a las películas, comiendo pizzas buenísimas que nos regaló Telepizza y cantando canciones. Después, nos fuimos a visitar a los niños que no pudieron asistir a la fiesta porque estaban malitos ese día.
La verdad es que es duro ver a niños con esta enfermedad pero anima mucho ver como la Fundación Aladina les da un poquito de felicidad, les conoce y les ayuda para hacerles más fácil el camino.
Salimos un poquito tocadas del hospital pero felices por haber podido estar con ellos, hacerles pasar un buen rato juntos y haberles dejado la sala preciosa para que Papá Nöel no se perdiese al llegar 😉
Queríamos agradecer el apoyo a todas las personas que nos han ayudado a realizar esta fiesta. Todas ellas han aportado algo y no queríamos acabar el post de hoy sin deciros GRACIAS, en especial a Tere, Patri y César.
Gracias por supuesto también a la Fundación Aladina por habernos dado esta maravillosa oportunidad y por estar ahí cada día haciendo que los niños y familiares vivan sus enfermedades de una manera más agradable.
¡Nos vemos la próxima semana, llegaremos con un post 100% navideño para que apliquéis en estas fiestas!
